martes, 17 de abril de 2012

LA PROMESA SIGUE EN PIE



La promesa sigue en pie,
como el guerrero europeo,
en  noche cerrada de invierno
como aquel Este del cuarenta y tres,
 un objetivo para atacar,
un Ideal que defender 
Nunca me echaré atrás, nunca me rendiré.

La promesa sigue en pie,
 negro horizonte frente a mis ojos,
y en mi cabeza esos sueños
orgulloso de  contracorriente ir,
 inconformismo por bandera,
disidencia en mi misma trinchera.
Nunca me echaré atrás, nunca me rendiré.

La promesa sigue en pie,
mientras la usura perdura,
de la diestra y la siniestra me separa,
su materialismo apesta,
un Ideal superior más cerca de mi Yo,
es como entiendo a mi Dios.
Nunca me echaré atrás, nunca me rendiré.

La promesa sigue en pie,
es lo que tiene ser libre,
compromiso, lucha y fe,
así no se puede perder
aunque me veas caer,
esto es grande, esto es fecundo.
Nunca me echaré atrás, nunca me rendiré.

La promesa sigue en pie,
  ten coraje si dices ser de los míos,
o te declaras mi enemigo,
no son muertos mis caídos,
son el Ideal que sigo,
y por ellos lucharé.
Nunca me echaré atrás, nunca me rendiré.

La promesa sigue en pie,
no me dejaré pisar,
si mi estirpe es Imperial
aquellos me lo demandan,
por los hijos que vendrán
no voy igual que tú a pensar.
Nunca me echaré atrás, nunca me rendiré. 

La promesa sigue en pie,
por muchos años que pasen
y otros el paso marquen,
hacia el infierno se vayan
que yo camino en sus llamas
es lo que tiene ser fiel.
Nunca me echaré atrás, nunca me rendiré.

-J. Garrido-

De Poesía disidente