martes, 13 de marzo de 2012

LA VERDAD NOS HACE LIBRES


PROHIBID TRANQUILOS
Prohibid, prohibid tarnquilos, allí donde aún exista un halo de libertad.
Vuestra arbitrariedad no es sino la escalera por la que ascendemos sin error.
Y vuestras prohibiciones no son más que las señales de debilidad de la tiranía, que engendran resistencia.
Las jóvenes generaciones no cederán ante la fuerza bruta.
¡Permanecemos indomables y firmes en la fe!
¡Prohibid pues, prohibid libros, el sentido de la justicia y del honor, prohibid la libertad, el pueblo autóctono y la patria!
Reímos a carcajadas sobre vuestra pequeñez espiritual y lloramos vuestra falta de entendimiento
Lo que desea vivir no se deja prohibir con parágrafos, tinta y papel.
Podéis mantener esclavos y alquilar mercenarios, pero la vida y la verdad, no lo olvidéis, están con nosotros.

-Dedicado a la memoria del Dr. Fritz Stüber (1903-1978)-